El amigo Flavio Infante ha traducido el trabajo «LOS ORÍGENES APOSTÓLICO-PATRÍSTICOS DE LA "MISA TRIDENTINA"» de Sor María Francesca Perillo, F.I. Reproducimos ahora su introducción y nos tomamos la licencia de publicar el artículo en nuestro estante de scribd.
Con
la satisfacción del deber cumplido, ofrecemos la traducción de este extenso
pero invalorable texto, correspondiente (con algunas añadiduras posteriores y
profusión de notas al pie) a la ponencia de sor Maria Francesca Perillo, de la
estigmatizada rama femenina de los Franciscanos de la Inmaculada, en el Tercer Convenio Summorum Pontificum celebrado
en el Angelicum de Roma entre el 13 y el 15
de mayo de 2011. Para mayor comodidad de acceso al mismo, lo hemos adjuntado en
la columna derecha del blogue, entre aquellos textos que integran la sección
«Jugo de doctrina sobre fe y liturgia».
Nunca
estará de más insistir en que la gravedad de la crisis de la Iglesia se funda
muy principalmente en la llamada «cuestión litúrgica». Entre los autores hay
amplia coincidencia en afirmar que el protestantismo impulsó su ruptura con la
Tradición precisamente a través de significativos cambios en el culto, y entre los hallazgos más celebrados de dom Guéranger se
cuenta el del reconocimiento de la existencia de una
«herejía antilitúrgica» desde el jansenismo a nuestros días, mirante a
debilitar la certeza de la fe. De ahí lo dramático de los cambios que
afectan a la vida de la Iglesia en el último medio siglo, cuyo carácter último
e inspiración quedó suficientemente manifiesto por Paulo VI en la Audiencia
General del 13 de enero de 1965, cuando dijo entre otras cosas que «es menester reconocer que una nueva pedagogía espiritual ha
nacido con el Concilio: es
ésta su gran novedad; y nosotros no debemos dudar en hacernos primeramente
discípulos y luego sostenedores de la escuela
de oración que está por comenzar. Podría
ocurrir que las reformas toquen costumbres queridas e incluso también
respetables; podría ocurrir que las reformas exijan algún esfuerzo para con
éstas que no resulte agradable; pero debemos ser dóciles y tener confianza: el
plano religioso y espiritual que se nos abre por delante merced a la nueva
Constitución litúrgica es estupendo por profundidad y autenticidad de doctrina,
por racionalidad de lógica cristiana, por pureza y por riqueza de elementos
cultuales y artísticos, por correspondencia a la índole y a las necesidades del
hombre moderno».
Tampoco
resultará difícil hacerse una idea de la tensión espiritual que acompaña a las
circunstancias actuales si, después de la lectura de este trabajo, pasamos a
considerar los principios expuestos recientemente por sor Fernanda Barbiero,
dorotea, puesta al frente de las hermanas Franciscanas de la Inmaculada con
motivo del comisariamiento que sufre la orden: «nosotras, las religiosas, hemos
sido formadas en un tipo de fe y de espiritualidad que nos aparta de la razón.
Es una espiritualidad congelada en la filosofía del ser, ya no más actual por
la urgencia de construir una ética. Y ética quiere decir relación de vida, no
razón [...] Nosotras debemos simplificar la religiosidad y volverla más cercana
a las necesidades reales de los pobres. Hay mucho de "invisible",
mucho arcano. La dirección de la vida religiosa parece demostrar que la
santidad tiene su epicentro en el más allá, en lo invisible, o en una caridad
mucho más cercana a la limosna que a la responsabilidad y al compromiso por un
mundo más justo [...] Debemos reconciliarnos con la historia como único templo
en el que Dios ha tomado rostro y casa».
Y
con perdón de los lectores por preceder estas exquisitas páginas que siguen con
comprobaciones tan amargas, dejamos ahora hablar a quien corresponde hacerlo. Si hii tacuerint, lapides clamabunt.
6 comentarios:
Anónimo:
Todos los días, más o menos a la misma hora... Hay tratamientos eficaces. Las neurociencias han avanzado mucho.
Supongo que debe tratarse del mismo obseso que pasó por casa soltando sus deposiciones pseudo-tradi, "freaks" o como cumpla elencarlas.
Gracias por reproducir el texto, y por bajarlo a scribd -tarea que yo no hubiera sabido resolver. Les aclaro solamente que quedaron un poco revueltos los párrafos introductorios, cumpliéndose al pie de la letra aquello de que «los primeros serán los últimos», y viceversa.
Cordiales saludos.
Arreglado. Gracias.
Redacción: ¿qué opinan de las diferencias entre el Misal de 1962 y las ediciones anteriores a Pío XII? (nueva Semana Santa, rúbricas, calendario, &c.) No pretendo levantar polémica, sólo conocer la postura de esta bitácora.
Muchas gracias.
Kyrie eleison
Hay un amigo de nuestra bitácora que tal vez pueda decir algo con más fundamento que nosotros.
Un artículo en italiano, aquí:
http://disputationes-theologicae.blogspot.com.ar/2010/03/la-riforma-della-settimana-santa-negli.html
Gracias, conocía el artículo. Estamos bastante de acuerdo, entonces.
Kyrie eleison
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