martes, 29 de noviembre de 2011

Tradicionalismo pretridentino


La bitácora Liturgiae Causa es representativa de una forma un tanto singular de tradicionalismo, que podríamos denominar tradicionalismo pre-tridentino, radicalmente antimoderno o “primomilenista”. Por lo que nos parece conveniente hacer algunas aclaraciones sobre esta forma de tradicionalismo: dogmáticamente, es imposible  prescindir de los concilios tridentino y Vaticano I. No obstante, sería posible, y deseable, que la teología –sin afectar los dogmas definidos por los concilios- redescubriera el valor de la Tradición, sobre todo en el testimonio de los Santos Padres, y volviera a jerarquizar lugares teológicos devaluados por esa deriva magisterialista, en virtud de la cual la tarea del teólogo pareciera reducirse a encadenar fragmentos de documentos oficiales y glosarlos sin mayor atención a la Paradosis. Litúrgicamente, sería muy provechosa una restauración litúrgica de todas las formas tradicionales del rito latino, sin imponer de modo uniforme el rito romano de 1962. Por último, en cuanto al ejercicio de la autoridad jerárquica, nos parece muy discutible que la superación de la actual crisis eclesial pudiera llevarse a cabo mediante un simple retorno al modo de gobernar de los tiempos de Pío XII y el cardenal Ottaviani. Con las aclaraciones precedentes, ofrecemos nuestra traducción de la entrada de Patricius, animando como siempre a tomar lo verdadero y desechar lo falso.
El P. Chadwick en English Catholic ha escrito una entrada muy relevante, advirtiendo a los anglicanos papistas en contra de la comunión con Roma; o, al menos, así lo leí yo. El mensaje principal de la entrada es que no existe lugar para ninguna clase de tradición (o “patrimonio”) anglicano en la Iglesia romana; sólo obedecer ciegamente la nueva ortodoxia definida y mandada por el Magisterio contemporáneo (expresado en las filias y fobias del Santo Padre), como ser, formas ordinaria y extraordinaria del rito romano, etc. Y uno no puede contener la risa. Del mismo modo que yo, como tú, querría algo más que una cotta ordinaria cada domingo; y uno se vuelve sospechoso, hasta que algo menos conveniente aparezca y uno sea expulsado.
Actualmente soy de la opinión de que los neoconservadores son más peligrosos que los “tradis”. Los tradicionalistas, al menos, tienen cierto grado de distanciamiento con Roma; muchos quieren ver al “viejo rito” en cualquier forma más o menos reconocible, otra vez in situ, incluso si los ornamentos y las rúbricas son más bien modernos.Algunos expresan en forma privada su frustración ante Summorum Pontificum, viéndola como una medida temporaria, un medio para un fin, una mano tendida hacia la SSPX, etc. Algunos son peligrosos y quieren un regreso a 1962.
Para los neoconservadores, sin embargo, para quienes las expresiones forma ordinaria y forma extraordinaria son como su segunda naturaleza, la Tradición no significa nada. Para ellos la obediencia al Magisterio es lo primero, la consciencia y el conocimiento de la Verdad, lo segundo, es decir, son irrelevantes. Que la Tradición pueda tener una auctoritas independiente al Papa reinante es un concepto que no penetra en sus pequeñas mentes, encantados con un Papa totalitario y su entorno de obsecuentes en el Vaticano.

11 comentarios:

Juancho dijo...

Yo leí varias veces el blog "Liturgiae Causa" y algo que me llama la atención es como este blogger de menos de 40 años puede ser tan atrevido en sus afirmaciones.

Llamar "cosas malas" a los libros litúrgicos de 1962, o a la Misa no cantada, debe ser una broma o algo que no puede tomarse en serio.

Estás tan seguro de lo que decís? Lo estudiaste tanto tiempo, lo meditaste tanto, como para afirmarlo?

Los jóvenes debemos ser más prudentes cuando juzgamos al pasado.

Incluso el presente.

Esos fanáticos embanderados en causas quizás buenas, dandole lecciones a todo el mundo, subidos a una cátedra pontificando, la verdad no me parece que hagan bien.

Juancho.

Pepeluis dijo...

Patricius es un Wanderer inglés?

Hermenegildo dijo...

¿Y por qué habríamos que prescindir del Concilio de Trento y no, en cambio, del Concilio de Nicea?

No tiene ningún sentido.

Por lo demás, blogger, ¿a qué se refiere Vd. con todas las formas tradicionales del Rito Latino? ¿A los ritos mozárabe y ambrosiano? ¿A los diversos misales romanos existentes antes de la unificación promulgada por San Pío V?
Los ritos tradicionales de las órdenes religiosas han sido permitidos por la Instrucción "Universae Ecclesiae".

Anónimo dijo...

Yo creo que ese tipo es un friki desocupado.

Fr.J.

Anónimo dijo...

Sarum, York y Braga... Mozárabe tradicional en Hispanoamérica, etc.

Anónimo dijo...

Pues para mí hace falta que regrese el Santo Oficio con todo su poder y que ponga a parir a progresaurios y filolefebvrianos.-

Gelfand dijo...

Ya me decía a mi un profesor...hay utopías y hay ucronías. Y hay ucronistas hacia atrás que quieren volver a la época en la que el papá era un principe entre principes que ni nombraba obispos y otros quieren que sea un obispo decorátivo que tampoco nombra obispos. Debe ser eso que dicen algunos que al final los extremos se tocan...

serrlorca dijo...

Pues si ha de regresar la misma Inquisición que ejecutó a un pobre maestro protestante, Cayetano Ripoll, a instancias de una amante despechada, más vale que se quede allí donde no moleste mucho.

El pobre Cayetano, de ser un "vivalavida", amante de la joven esposa de un personaje poderoso, no creer en nada, no rezar y no ir a Misa, pasó a creer en Cristo, rezar, y romper la relación con su amante. Pero siguió, claro, sin ir a Misa.

¿Y por qué se dió ese cambio en su vida? Pues por la Guerra de Independencia. Capturado por las tropas napoleónicas, un médico protestante francés le salvó la vida... para perderla a su regreso a España.

Y así, la Inquisición española ajustició a este pobre maestro de pueblo. Pero mientras tanto, tras la Guerra de Independencia, a lo largo de un cuarto de siglo, las logias se extendieron a lo ancho de toda España sin que la Inquisición tuviera nada que decir.

Y hasta tal punto no tuvo nada que decir que, lógicamente, acabó siendo disuelta por inútil. Lo único que hizo durante aquellos años fue el proceso y la ejecución del pobre Cayetano. En esas condiciones, queridísimo anónimo, prefiero que la Inquisición no regrese.

Pero si a lo que se refiere es que desearía que la Congregación para la Doctrina de la Fe ejerciera el papel magisterial y disciplinario que ejerció otrora con otro nombre, permítame decirle que es vd. un "filolefevrianazo" de tomo y lomo, porque eso supondría que el Papa asumiera su dirección directa, y que la Secretaría de Estado volviera a su papel anterior al Concilio Vaticano II, importante pero secundario al de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

Ésa era una época en la que todavía no existían las conferencias episcopales y, por lo tanto, no podían desobedecer al Papa.

Bienvenido al corral filolefe...

Un saludo.

MIGUEL25 dijo...

Amén a esto que dice el blogger:

Para los neoconservadores, sin embargo, para quienes las expresiones forma ordinaria y forma extraordinaria son como su segunda naturaleza, la Tradición no significa nada. Para ellos la obediencia al Magisterio es lo primero, la consciencia y el conocimiento de la Verdad, lo segundo, es decir, son irrelevantes. Que la Tradición pueda tener una auctoritas independiente al Papa reinante es un concepto que no penetra en sus pequeñas mentes, encantados con un Papa totalitario y su entorno de obsecuentes en el Vaticano.

Los enemigos más acérrimos y peligrosos de la Tradición, de la obra de nuestros querido Arzobispo Monseñor Lefebvre, son los conservadores actuales de la Iglesia.

Ellos unilateralmente han roto todo diálogo y contacto con nosotros, la prueba de lo que digo es el portal de infocatólica (unos más de los tantos)

Todo comentario de los "lefebvristas o filolefebvristas", será sistemáticamente borrado.

Pues de acuerdo..si así lo quieren así lo tienen...

Masones y modernistas instalados en el más alto poder de la Iglesia, los están utilizando como a marionetas, todo ello en nombre de la OBEDIENCIA, que no es católica, es obediencia ciega...
y esa misma obediencia ciega es la que nos quieren imponer a nosotros..

Estos son los que quieren imponer por via de esa falsa obediencia un "acuerdo" a la FSSPX.

Sí claro, nosotros somos tontos y nos chupamos el dedo...

MIGUEL25 dijo...

Y es que la eclesiología de los conservadores, da pena y risa a la vez, como ellos obedecen a los modernistas, que preconizan una Iglesia, fiel al nefasto Concilio Vaticano II, donde cabe el error y la verdad, de la famosa "unidad en la diversidad", del aquí cabemos todos.

Pues el asunto es fácil:

quien OBEDECE EN TODO, tiene derecho a montar su chiringuito
en el que está reservado el derecho de admisión, y donde los mejores "clientes" son los propios
hijos o sobrinos de los sacerdotes conservadores..

Aquí lo pueden ver:

http://infocatolica.com/blog/reforma.php

lo que no sospechan es que Dios escribe derecho en renglones torcidos y esos niños serán los mejores "filo-lefebvrianos" cuando sean adultos.

Anónimo dijo...

Lo dicho, los neocones son los peores enemigos del catolicismo. HAcen el trabajo sucio de los progresaurios y se quedan tan campantes. Cigoña fue comprado por INtereconomia, le llegaron al precio. Se convirtio en meretriz del teclado . Y el gordo LF no tiene libertad economica y vive de los donativos a Infoneoconica. LOs kikos deben aportar significativos fondos, ya que los defiende tanto. Tocara al catolico individual y a su familia , buscar un sacerdote que celebre la Misa Tridentina y enseñe la sana doctrina. La nueva misa se presta a demasiados abusos.