viernes, 15 de febrero de 2013

Respuesta al amigo inquieto por los rumores



Un amigo de nuestra bitácora informa sobre persistentes rumores de una inminente aplicación de sanciones a la FSSPX y una condena de sus posiciones doctrinales. Hasta el momento no hay ninguna noticia oficial y parece poco probable que un Papa renunciante se aparte en los últimos días de su pontificado del nihil innovetur. Además de la información, el amigo nos pregunta sobre la posición de  nuestra bitácora en caso de confirmarse los rumores. Nos parece que antes de dar una respuesta simplista habría que hacer un poco de memoria.
Desde los comienzos de esta bitácora intentamos fijar con claridad nuestra posición doctrinal y nuestra actitud práctica respecto de la FSSPX. Buscábamos, entre otras cosas, disipar la confusión creada por el p. Iraburu con su vaporosa categoría de los “filolefebvrianos”. Volvemos ahora sobre seis puntos fundamentales:

1. Afirmamos que, en el plano doctrinal, no teníamos la certeza que muestra la posición de la FSSPX, razón por la cual no podíamos seguirlos en todo. Esta diferencia doctrinal, formal y de contenidos, se manifestó en numerosas entradas posteriores y comentarios de la Redacción. A diferencia de otras bitácoras, hicimos un intento por comprender y no tergiversar la posición de la Fraternidad, renunciando a esa "apologética" que se basa en la simplificación artificiosa y el anatema injusto. Todo ello sin cambiar nuestra "línea editorial" independiente.

A la fecha, no hay pronunciamiento magisterial definitivo que resuelva la cuestión planteada por el tradicionalismo. Por tanto, con un trato filial y respetuoso para con la Autoridad, y sin perder sentido eclesial, los fieles tradicionales pueden insistir ante la Santa Sede y, en el ámbito teológico y canónico, mantener vivo el diálogo y el debate.

2. Además, tocamos varias veces el punto doliente del valor del Magisterio conciliar, que es la raíz de la diversidad de posiciones teológicas. Nunca dimos a nuestra posición un valor dogmático. Por el contrario, oipinamos que la hipertrofia de la infalibilidad del Magisterio es causa de muchos problemas eclesiales y estamos absolutamente ciertos de nuestra propia falibilidad.




3. Sin hacer profecías, esbozamos  nuestras conjeturas sobre el futuro de la FSSPX y los resultados de las conversaciones con la Santa Sede. Los rumores actuales no nos toman por sorpresa.


4. En el ámbito práctico-disciplinar, dijimos cuál era el estatuto eclesial y canónico de la FSSPX y nos manifestamos claramente favorables a una pronta regularización. Razón por la cual se nos incluyó dentro del "acuerdismo".

5. Consideramos la posibilidad de un error en la posición doctrinal de la FSSPX, cuando tratamos acerca del tradicionalismo como problema de conciencia.


6. Publicamos una entrada que sugiere numerosos elementos para una autocrítica del tradicionalismo con el que nos vemos identificados.


Para nosotros, los grandes principios que permiten enjuiciar críticamente la categoría iraburiana del “filolefebvrismo” han estado claros desde el inicio del blog. Sin dudas, somos "caóticos" en muchos aspectos, pero estamos convencidos de que hemos tratado de ser consecuentes con  principios que juzgamos verdaderos y aplicables al caso de la FSSPX. En cuanto a nuestro aprecio por esta institución, además de la razón de nuestra filia expuesta como aviso para navegantes, debemos reconocer que es también fruto de nuestra reacción ante un ataque alevoso de los medios conservadores. 
¿Qué pasaría con este blog si se confirmasen los rumores que inquietan al amigo? Los hechos nuevos nos obligarían a revisar nuestras opiniones. 


10 comentarios:

Anónimo dijo...

¿que significa revisar las opiniones?¿que si el molinero excomulga a la Tradición ustedes lo van a seguir en eso? Si pasa eso ya sabemos que estamos mas cerca del fin y no tenemos que dejar que nos flagelen con esos latiguillos de cismáticos o sedevacante.

Redacción dijo...

Significa, por ejemplo, que si hay definición infalible sobre un punto, ya no cabe admitir la posibilidad de error al respecto.

Redacción dijo...

Los principios no cambian. Su aplicación a los hechos sí puede modificarse en función de hechos nuevos. No somos como Groucho Marx.

Hermenegildo dijo...

Las únicas excomuniones que han pesado sobre ciertos miembros de la FSSPX se han debido sólo a haber consagrado obispos sin mandato de la Santa Sede. Nunca se ha excomulgado a ningún miembro de la Hermandad por sus posturas doctrinales y mucho menos creo que se haga ahora, con un Papa que se va en unos días y que ha hecho mucho por intentar la reconciliación. Pensar en una excomunión ahora está fuera de toda lógica. Más realista, aunque no demasiado, veo yo una reconciliación de última hora.

Anónimo dijo...

Lógica suposición de Hermenegildo, esa de creer posible una reconciliación de última hora. Digamos, por ejemplo, del 28 de febrero a la mañanita.... y en forma de motu proprio.
Sería un golpe verdaderamente infalible.
Saludos

Anónimo dijo...

Si hubiese una condena hacia la FSSPX podría ser de 3 maneras:
1.- Hacia los obispos (no tendría mucho sentido, pues fue contra ellos la anterior por las ordenaciones, pero ahora cómo motivarla si tal supuesto delito fue "perdonado"?)
2.- Hacia los obispos y sacerdotes.
3.- Hacia los obispos sacerdotes y laicos.
Como laico, las posibilidades 1 y 2 me importarían, sencillamente, un carajo a la vela y seguiría recibiendo allí los sacramentos, que es donde lo hago más frecuentemente.
Como laico, ante la posibilidad 3°, lo mismo, aunque con 1 sola diferencia: mantendría a mis amigos sacerdotes de fuera de la FSSPX tan amigos como hoy, pero no les volvería a pedir sacramentos para los míos ni para mí para no ponerlos en un brete.
Porque hay de fondo una cuestión que es la única que importa: si ante la situación actual no hay excomuniones y las pocas que existieron se levantaron, ante "igual" situación, de haber una nueva excomunión, ya sea con las amplitudes de 1, 2 o 3, no pueden ser consideradas "serias", por más cara de serio que ponga el Papa este o el próximo al dictarlas. Y, si hoy no hay "cisma", tampoco en idéntica situación a futuro. Lo contrario es afirmar que lo mentado por la autoridad pontificia es constitutivo del ser por lo que existe el cisma si el Papa lo dice; ... filfa.
Ahora bien, si las excomuniones fuesen por "hechos nuevos", lo decidiré según esté o no de acuerdo con éstos y la consecuente pena canónica.
Tengo familia, no estoy para que me corran con la vaina de las excomuniones. En la Edad Media, ante una amenaza de este tipo, se mataban de la risa. Tal vez nos falte eso, ser un poco más hombres antiguos.
No solo para no pifiar en lo anterior, sino para no alborotar con cosas como las recientemente ocurridas (abdicación): en tiempos donde se me hace que mayor porcentaje que el actual se iba al cielo, cuando en la otra punta del Globo se enteraban del nombre del nuevo Papa, éste se estaba muriendo y elegían uno nuevo; pero nadie se espantaba. El foco estaba en la Gracia y en los sacramentos que le hacen las veces de normal tubería o conducto.
Me preocupa - no exagero- bastante más que mis críos hagan bien la Señal de la Cruz al bendecir la mesa que 25 abdicaciones en 25 años consecutivos vía efecto catarata.

El Carlista.

Martin Ellingham dijo...

Sería muy excepcional que se aplicaran sanciones a pocos días del nuevo cónclave. Y mucho más raro que se sancionara a los laicos.

Saludos.

Anónimo dijo...

Tenemos demasiada información. Nos distrae de nuestros deberes de estado. Nos aleja de lo concreto que nos compete y nos pierde en lo que no está en nuestras manos modificar. Una vida en el ensueño.

Anónimo dijo...

Antes sabían el Catecismo, hoy los nombres de los papables, las peleas vaticanas, las intervenciones quirúrgicas del Papa y hasta la marca del marcapasos; mientras son indiferentes ante un culto indecoroso y nadie mete preso a Kiko y el resto de la banda. Algo está mal. Falta sentido común y sobran datos. No se puso la atención en lo debido. Tiene que reventar por algún lado. El demonio se mata de la risa.

Anónimo dijo...

Que optimista Martín....