martes, 6 de septiembre de 2011

El miedo al Ordinariato



En 1989, desde la revista Concilium, el dominico Geffré, manifestaba sus reservas sobre las condiciones para la regularización canónica de las comunidades tradicionalistas vinculadas al Arzobispo Lefebvre. La parte principal del artículo de Geffré se concentraba en lo que, a juicio del autor, eran inaceptables concesiones doctrinales y disciplinarias de parte de la Santa Sede. He aquí las ideas centrales del artículo:

1. A la vista de los millones de católicos que viven serenamente de la herencia del Vaticano II, sorprende la importancia concedida a un puñado de integristas que se confunden de siglo. Que el Protocolo de acuerdo firmado por el cardenal Ratzinger el 5 de mayo de 1988 haya sido texto de referencia para la reintegración de los tradicionalistas resulta perturbador. Porque en el n. 2 del protocolo sólo se pide una aceptación explícita al núm. 25 de la constitución dogmática Lumen gentium, sobre la obediencia debida al magisterio eclesiástico. Acaso las demás enseñanzas fundamentales de la Lumen gentium y de los restantes textos sobre la Iglesia en el mundo, el ecumenismo, la libertad religiosa, ¿forman parte de esos «puntos enseñados por el Vaticano II o referentes a las reformas posteriores de la liturgia y del derecho, y que parecen difícilmente conciliables con la tradición» (núm. 3 de la misma declaración doctrinal)?
2. Hay hechos desconcertantes. Primero, las declaraciones de Dom Gérard Calvet, prior del monasterio benedictino de Santa Magdalena de Barroux (situado cerca de Avíñón, en Francia), que  explica en una entrevista que lo que su comunidad venía pidiendo desde 1983 —la misa de san Pío V, el catecismo, los sacramentos, todo de acuerdo con la tradición secular de la Iglesia— «se otorgaba sin contrapartida doctrinal, sin concesión ni renuncia». Merece la pena citar íntegramente las dos condiciones puestas por el prior de Barroux para la firma de dicho acuerdo: 1ª. «Que este hecho no signifique descrédito para la persona de Mons. Lefebvre. Esto se dijo varias veces durante nuestra conversación con el cardenal Mayer, el cual consintió en ello. Por lo demás, este estatuto se nos ha otorgado gracias a la tenacidad de Mons. Lefebvre...», y 2ª. «Que no se exija de nosotros ninguna contrapartida doctrinal ni litúrgica y que no se imponga ningún silencio a nuestra predicación antimodernista». Segundo, la Fraternidad San Pedro, fundada el 18 de julio de 1988 en la abadía cisterciense de Hauterive (cantón de Friburgo, Suiza). ¿Y cómo no sentir cierto malestar al descubrir que el nuevo superior general de la Fraternidad San Pedro es precisamente Joseph Bisig, asistente durante seis años del superior general de la Fraternidad San Pío X, y antiguo superior durante siete años del seminario integrista de Zeizkofen (Alemania)? ¿Habrá que entender que, en la Iglesia católica de 1989, conviene no sólo tolerar, sino alentar una «espiritualidad tradicional» que se distancia abiertamente del espíritu del Concilio y del espíritu de Asís? Tercero, la creación, por decreto fechado el 28 de octubre, de la Fraternidad San Vicente Ferrer como instituto de vida consagrada de derecho pontificio, sometido a la autoridad de la Santa Sede por medio de la comisión «Ecclesia Dei». Se trata, en realidad, de nueve «dominicos» integristas de Chéméré-le-Roi, en Mayenne (Francia), que habían usurpado el nombre, las constituciones, la liturgia y el hábito de la Orden, pero que terminaron rompiendo con Mons. Lefebvre ya antes del cisma. El decreto no les concede la denominación de «Frailes Predicadores», pero prevé la vida regular a ejemplo del uso en vigor entre los hijos de santo Domingo, así como el uso de la liturgia dominicana, según los libros anteriores a 1962 y del hábito dominicano. ¿Cómo se concede a un grupo ajeno a la Orden el uso de las antiguas constituciones y de la liturgia dominicana anterior a la reforma litúrgica de 1962 y, por tanto, totalmente desconectadas de la tradición viva de la Orden?
3. Los hechos hablan por sí mismos. Cabe preguntar si el actual interés del Vaticano en no dejarse desbordar por los tradicionalistas no se opone exactamente al interés del Vaticano II, que quería permanecer a la escucha del mundo y conectar con las legítimas aspiraciones del hombre moderno. So pretexto de dar satisfacción a los eternos nostálgicos del preconcilio, se corre el riesgo de desalentar a una muchedumbre de fieles que siguen viviendo el acontecimiento del Concilio Vaticano II como acontecimiento de gracia para la Iglesia y para el mundo.

No es raro que los progresistas repitan hoy los mismos tópicos que en el pasado. Lo que nos preguntamos es qué dirían los necons si se llegara a una regularización canónica de la HSSPX, con un acuerdo doctrinal de contenido semejante al de 1989, pero ahora acompañado de las amplias libertades de acción que ofrece la figura  del  Ordinariato personal.

P.S. Nuestros vecinos infocatólicos, al decir de don Latino de Híspalis, cada día se ponen más "estupendos". Su director nos obsequia hoy con un episodio más de su auto-exaltación psico-biográfica, a cuyo lado el Cid campeador es una hermanita de la caridad. Menos mal que sólo tiene un blog. Y menos mal que sólo se dedica a exigir dimisiones acompañadas con citas ad hoc de la Sagrada Escritura, con un sobrecogedor desierto de ideas. Dedica una entrada al tema de la reunión del 14 de septiembre don Miguel Vinuesa, al que habremos de agradecer que nos permita abrigar la sospecha de que anida en nosotros el don de la clarividencia- la capacidad de ver a través de cuerpos opacos- pues, leído el título de la entrada, nos vemos capaces de adivinar su contenido. En el de hoy nos encontramos un buen ejemplo de tópicos predecibles. Auguramos también que pase lo que pase en la reunión romana del 14 de septiembre,  a Infocatólica le parecerá fabuloso. Habla Vinuesa de la abierta acogida paternal del Papa a la Hermandad San Pío X. Hay que recordar que la Santa Sede se compone del Papa y quienes con él colaboran para el gobierno de la Iglesia. Paternalmente al cardenal Castrillón se le apartó y aceptó su dimisión de manera muy poco caballeresca, y al cardenal Ranjith se le mandó de un puntapié a Sri Lanka para mayor gloria del bertonismo curialesco. Si pretende Vinuesa hipostasiar a la cúpula de Bertone en la persona humana de Benedicto XVI, está en su derecho. Nosotros haremos, como es habitual, suspensión de juicio hasta que todos los hechos pueden articularse y por lo tanto ponerse en claro la actitud tanto de las autoridades romanas como las de la Hermandad San Pío X. Intentaremos estar atentos.

22 comentarios:

Miles Dei dijo...

Es que son el culmen de la contradicción o, mejor, la continua incoherencia. Los problemas de la Iglesia, esa causa única que crotora la cigúeña sin darse cuenta que es causa sui también, es la tibieza del ángel de la Iglesia de Laodicea. Una tibieza que le ha llevado a tener una corte que en nada desmerece de las mejores de Avignon, cuyos pontífices no sólo vivieron entre temores, sino también entre esplendores. Habrá zancadillas y gordas. Nada de que sorprenderse, pero que hace estar precavidos y orantes como las vírgenes prudentes.

Anónimo dijo...

Lo que no entiendo es por qué en infoneocónica arremeten contra los lefebristas y ahora están emocionados con un acuerdo.

No hay por donde cogerlos.

Miles Dei dijo...

Porque tienen que mantener la careta de que lo suyo es el magisterio más chachi piruli semperfidelino que jamás se ha visto. Si encarta son más lefebvristas que monseñor Lefebvre y si encarta son más sobrinos que el mismo sobrinísimo nepote. Todo por la Iglesia... que sueñan, claro. Aparte de esa muestra de voluntad de poder (voluntarismo ciego) no tienen nada más que aportar en fidelidad a la tradición eclesial. Siquiera en comprensión de la ley canónica que tanto pregonan.

Miles Dei dijo...

Luis Fernando se define a sí mismo con esta frase de hoy:

"Durante mucho tiempo, sin duda demasiado, las únicas voces críticas en la Iglesia con repercusión mediática venían del ámbito heterodoxo-progresista o, en el otro extremo, del lefebvrista"

Anónimo dijo...

Ludovicus dijo,

Hilarante la indignacion del dominico porque los frailes de la San Vicente Ferrer no están entroncados en la tradición de la Orden para celebrar el rito dominico, cuando fue la propia Orden la que entregó, en los setenta, el rito, en bandeja de plata, a Bugnini.

El perro del hortelano...

Anónimo dijo...

Ludovicus dijo,

O "la maté porque era mía"

Siderúrgico dijo...

Leyendo el artículo de Geffré, se da uno cuenta que la obsesión de los ultraconciliares (por llamarlos de alguna forma) no era tanto "permanecer a la escucha del mundo y conectar con las legítimas aspiraciones del hombre moderno" sino más bién pasar página, empezar de cero y destruir completamente la Tradición Católica. Si no, no se entiende en qué habría de "desalentar a una muchedumbre de fieles que siguen viviendo el acontecimiento del Concilio Vaticano II como acontecimiento de gracia para la Iglesia y para el mundo" el que otros fieles viveran su fe tal y como se hacía hasta antes del CVII. Esto explica mucho sobre la actitud actual ante la Misa Tradicional porque, sobre todo, temen que los católicos hagan comparaciones.

Anónimo dijo...

Me parece una excelente idea lo del ordinariato, pero en España seguro que no nos enteramos de nada.
Aquí se ha minimizado el Summorum y la Instrucción. Ni la gente de Misa diaria sabe lo que es eso. Y donde primero lo han minimizado ha sido en ciertos blogs. Hombre, a lo mejor hay " miedo " a nuevas corrientes que quiten la mamandurria a más de cuatro...
Espero que se consiga. Seguro que muchos entramos en ese ordinariato, aunque sea con " centro " en otro país, porque aquí será imposible.

Walter E. Kurtz dijo...

Si bien desde el punto de vista canónico, la figura del ordinariato es un "paraguas" interesante. Me parece que su implementación traerá complicaciones importantes. Y no solo por "maldad" de los obispos diocesanos, sino porque esta figura plantea dudas importantes desde el punto de vista teológico puesto que, si bien en la "tradición anglicana" tiene una justificación, no queda nada claro cuál sería la del caso "tradicionalista". No es está reconociendo la ruptura litúrgica de la reforma 1969/70? O, peor aun, que no se trata de "dos formas" del mismo rito (tesis Ratzinger), sino de otro rito? Cómo se implementaria la opción de los fieles dado que no existe una "tradición" étnica, nacional, etc.? Se le daría el status de los ritos orientales o de los ritos latinos no romanos? Pero cómo se justifica?

Me temo que el ordinariato no va a ser el fin de los problemas, sino que va a traer otros. Miremos las limitaciones que se han puesto en Inglaterra para evitar la fuga de fieles que no son ex-anglicanos hacia el ordinariato, limitaciones que se aplican no a la asistencia a Misa sino -como en el caso oriental- en el bautismo, matrimonio y aceptación al sacerdocio.

Miles Dei dijo...

Es la hora de que la Fraternidad de un paso decisivo para afianzarse canónicamente y luego que la Santa Sede de otro para mostrar que lo que se planteaba no era un mero parchear un inevitable cisma, sino una auténtica ansia de reformar algunas cosas para que Dios evite el cisma. Pero ya ven la situación.

Hermenegildo dijo...

Hombre, el Cardenal Castrillón había cumplido ochenta años y en la Curia Romana nadie rebasa esa edad, salvo el Papa.

Por lo demás, si se establece el Ordinariato personal para la FSSPX, ¿podrá agregarse cualquier católico tradicional que lo pida? Sería lo lógico.

Pioquinto dijo...

Estamos en un momento coyuntural muy apropiado para que se llegue a la total comunión con Roma. El Santo Padre está en estado de sitio, con Boff, Sobrino, Queiruga y demás congéneres organizando una tenida anti-iglesia. Y la batalla es multifrontal, con la Juan XXIII (nombre muy ad-hoc), la apantalonada abortista, feminazi y progaymonio monja benedictina Forcades, el ex-claretiano Vilar organizando motines contra-papam, el amago del gobierno irlándes , de intervenir las confesiones, del inacabable escándalo del abuso sexual, que se dejó enraizar en la administración pasada, el cisma de los curas que se están abrasando en Austria (329 de ellos), escándalos como el de la Universidad Pontificia de Lima, que quieren seguir expoliando a la iglesia, sin ser católicos, los contestarios de la Iglesia alemana, que forman su chiringuito aparte y el no menos escándalo de msr. Sistach, admitiendo abortos. La maleza sigue creciendo y los problemas, también…. Sigue….

Pioquinto dijo...

Hay tantísimos sectores eclesiales a los que les importa un pito lo que piense Roma, cuando ya han creado supropio coto de caza, hacen lo que les viene en gana y si alguien los critica, lo hace con el mayor tacto y comedimiento del mundo, y al final no hay sanciones, no hay castigos , no hay excomuniones y vuelta a empezar. Además , las excomuniones las reservan para peces más gordos.

Por eso, vuelvo a afirmar, el terreno es propicio para la siembra. La gray de la SSPX está en pie de guerra para tomar acción de acuerdo a lo que resulte del 14-S. Si se acepta el C V 2 en todos sus puntos, ya nos llevó patas de catre. Si no se exige que se adopte tal concilio ni se impone la mordaza, estamos salvados. Pueden canonizar a Juan de las Pitayas, a Ghandi, a Margarett Tatcher o Leonid Brezhnev, si éso les place. La Tradición tiene un camino en la Iglesia. Pero la batalla continuará. Animo y sigamos orando.

Anónimo dijo...

Un buen comentario, Pioquinto. Lleva usted toda la razón.

Anónimo dijo...

Me gustaría saber cómo aplicar una hermenéutica de continuidad entre el recibimiento de Pío XII a la juventud en 1948...

http://www.britishpathe.com/record.php?id=27448

Y cualquiera de las JMJs de Juan Pablo II y Benedicto XVI, de 1986 en adelante, hasta llegar a la JMJ 2011...

http://www.traditioninaction.org/RevolutionPhotos/A431WYD.html

http://www.traditioninaction.org/RevolutionPhotos/A432WYD-2.html

Mientras no me lo expliquen, al menos para mí, la Tradición no es que tenga "un camino en la Iglesia": ES la Iglesia.

La FSSPX, con mons. Fellay al frente, habrá de tener eso muy en cuenta la semana que viene, no vaya a ser que, tras tantos "contactos", le acabe pasando lo mismo que a los Redentoristas Transalpinos, a la FSSP o al IBP.

Cougar.

Miles Dei dijo...

Se necesita a la FSSPX dentro de la Iglesia. La necesitamos si de una vez por todas hemos de hacer palanca para acabar con tanta inmundicia. No hay camino fuera de Cristo, sino dentro y por mucho que parezca una locura y una paradoja fácilmente evitable con un requiebro teológico, siempre alegarán en contra la visibilidad que une a esos chicos llenos de impureza y otros vicios con el Cuerpo de Cristo por encima de un dechado de virtudes, que permanece visiblemente fuera de Cristo.

Eso es lo que tiene que ver la Fraternidad y creo que lo hace: el bien que causará dentro de la Iglesia visible, antes que fuera de ella. Luego que como parte del Cuerpo de Cristo y con todos los que de verdad estamos ya hartos de este naturalismo deforme, presione a la Santa Sede para que siga dando pasos a la reforma según voluntad de Dios. La forma canónica es lo de menos a este respecto, es la importancia de la visibilidad de la Fraternidad como parte del Cuerpo de Cristo en cuanto representa la visibilidad de la Tradición que permanece en la Iglesia, aunque no toda la tradición sea la Fraternidad.

Miles Dei dijo...

Por cierto, con esas fotos cada vez tengo más claro que fue la mano de Dios el que impidió la comunión masiva entre tanta impureza. El que no lo ve está ciego. Permitió en su providencia miles de confesiones, porque ama a los pecadores, pero el Señor es celoso de su casa, que es su cuerpo, su templo.

Anónimo dijo...

Cougar
Lo mejor que tienen los de TIA para criticar las JMJ son unas fotos lúbricas o impúdicas, de algunos jóvenes, sobre un universo de dos millones de sujetos, es que son unos frikitradis.

Anónimo dijo...

Anónimo 11:28

Lo verdaderamente friki, amigo mío, es que esas fotos se hayan podido hacer en unas jornadas de recepción al Santo Padre y que, para más fikidad, ningún responsable quiera darse por enterado.

Cougar.

Anónimo dijo...

Miles Dei

La pertenencia a la Iglesia no viene únicamente dada vía otorgamiento de "missio" canónica, o vía "visibilidad", sino también vía fidelidad al Magisterio dogmático e infalible de la propia Iglesia. De lo contrario, lo de Asís 1-2-3, lo de algunas de las fotos de las JMJs, al igual que las teologías de Cardedal, Ladaria, Chardin, Rahner y von Balthasar, formaría parte de la Iglesia, pero la tradición en general, y la FSSPX en particular, no. La realidad es justo la contraria.

Las mismas autoridades que llevan medio siglo dirigiendo y promoviendo la herejía y la apostasía planetarias son las mismas que deben diseñar, aplicar y vigilar la aplicación del (aún) supuesto futuro status canónico de la FSSPX. SÍ, en tanto que no sean formalmente conscientes de su herejía apóstata, seguirán siendo unas autoridades a las que habrá que seguir sujetándose. Pero tanto sus decisiones como sus acciones sólo serán válidas y sólo habrá que obedecerlas en tanto en cuanto que no sean materialmente contrarias al Magisterio dogmático e infalible de la Iglesia.

Hace falta fidelidad al Magisterio dogmático e infalible de la Iglesia. Y si así se es más visible, pues bien. Pero si no se fuera tan visible, pues también. A no ser, claro, que exista una teología consolidada capaz de definir con toda precisión y seguridad una casuística sobre la "visibilidad" institucional, de tal forma que sea capaz de atestiguar su naturaleza ontológica según su grado de "visibilidad".

Cougar.

Miles Dei dijo...

Cougar, he aludido al requiebro teológico de facil aplicación para evitar el estar fuera de la Iglesia aunque no se vea. Pero a la gran masa de fieles la visibilidad, que es parte de la economía sacramental, es lo que le importa. Y esa visibilidad es la estructura misma de la Iglesia que se articula en cada diócesis hasta llegar al nivel de parroquia y de un confesionario. ¿Han pensado la labor que harían sacerdotes tradicionales sentándose a confesar en las parroquias allí donde los párrocos no se sientan?. Eso es lo importante: que una institución canónicamente aprobada pueda llegar hasta el nivel parroquial sin problema alguno (pegas siempre las habrá pero serán sin fuerza canónica) y con todos los derechos si se quieren salvar almas, que al fin y al cabo es por lo que Monseñor Lefebvre hizo lo que hizo de manera consecuente. De lo contrario en nada se diferenciaría de una secta más que en un momento dado pasa a la historia de las sectas cismáticas como tantas. ¿Alguien duda que Tertuliano no era inteligente y tenía amor por la Iglesia y celo por la misma?

Miles Dei dijo...

sobre un universo de dos millones de sujetos
---------------------------------
Precisamente las fotos y vídeos de la JMJ desmienten ese universo y lo dejan en poco más de la cuarta parte.

Sigo sin entender ese ansia de presentar cifras grandiosas como si eso singificara algo.

Sólo una vez Cristo presentó cifras grandiosas y fueron de ángeles y para hacer constar que había rechazado ese modelo terreno de hacer las cosas. Sabe bien Nuestro Señor que en las personas humanas, la salvación no se resuelve por obra humana alguna -ni siquiera angélica-, sino por su soberana voluntad que se manifiesta en lo sencillo y humilde. Parece mentira que sigan sin comprender el asunto.